Es
la calle del casco antiguo de Soria. Aquí se concentran no sólo
los comercios de más rancio sabor de la ciudad, sino realmente toda
la ciudad paseando, Collado arriba y Collado abajo, en los días de
fiesta y en todos los demás. Comercios que aquí tienen su
feudo (¡ o casi, que ya les hubiera gustado cubrirlo !). El Casino
Numancia, la Casa Lázaro, El Rosel, la librería de las Heras
o la farmacia Carrascosa, son algunos de esos lugares que parece que siempre
hubieran estado allí. 
Y
por supuesto las castañas asadas, toda una tentación cuando
hace frío (y muchas veces lo hace...). A esta calle, porticada en algunos tramos, dan lugares como la plaza del Rosel con su circular conjunto de escudos, la calle Estudios y su mercado (no dejes de contemplar la fachada de forja de la vivienda situada en su extremo), el tubo o Plaza de San Clemente y la Plaza de Herradores en su extremo final.
